Locales

Tras la crecida del Guanchín, familias de Fiambalá perdieron todo

Como consecuencia del temporal, aún varias localidades se encuentran sin energía ni agua potable y los equipos trabajan para restablecer los servicios.

  • 11/03/2025 • 09:27

Los operativos para poner en resguardo a quienes padecieron las consecuencias de las intensas precipitaciones culminaron ayer en Fiambalá y pueblos del norte donde familias quedaron muy afectadas porque perdieron todas sus pertenencias.

Muchos se autoevacuaron por temor a la crecida del río Guanchín y ahora que el agua bajó, sus viviendas quedaron con lodo.
Desde las comunas que les compete trabajan en diversos puntos, mientras relevan las necesidades que son cada vez más al correr los días. Como consecuencia del temporal, aún varias localidades se encuentran sin energía ni agua potable y los equipos trabajan para restablecer los servicios.

Soledad Ocampo, secretaria de Control de Relaciones Mineras y Ambientales de la Municipalidad de Fiambalá, dijo que vienen trabajando con todo el equipo en poner en resguardo a los afectados, más alla de los cargos ya que todos tuvieron que sumar esfuerzos ante la emergencia. Así, contó que la lluvia en el cordón montañoso hizo crecer el río Guanchín de una manera que hace años no se veía, provocando serios daños en barrios de la zona.

“El caudal de agua que bajó fue muchísimo, arrasó con las defensas, arrasó con algunos domicilios particulares, rompió caminos, tapó cloacas. El daño, si uno lo tiene que cuantificar, es muchísimo, lo único que podemos agradecer es que no hubo pérdidas de vidas, sí hay algunos animalitos, por ejemplo, ovejas que desaparecieron y lo mismo que pasó en Belén, pero sí podemos decir que la mayor cantidad de daños fueron habitacionales.

En Fiambalá, particularmente hubo dos domicilios, uno en Barrio Barrialitos, perteneciente a una señora de casi 90 años, de apellido Sinche, a ella se la tuvo que evacuar completamente, porque no hubo oportunidad de sacarle muebles, colchones, nada, porque el agua directamente entró y tapó todo, casi 70 centímetros al interior de las ventanas estaba el agua, el lodo, en realidad era greda.

Y en el caso de la familia de Barrio Retiro, también, el agua fue sorpresiva, entró, justo estaba una señora también que tiene aproximadamente 86 años, allí ella estaba juntando pasas, que es de lo que ella vive y le levantó todo, quedó atrapada entre las bolsas de pasas que ella tenía, el agua le llegaba al pecho, gracias a Dios que estaba su hija. La casa de ella, al ser de adobe, cedió, si bien es cierto aún no se ha caído, lamentablemente ese domicilio particular ya no puede ser habitado.

También está el caso de Sandra Yampa que es docente y que perdió todo porque el lodo arrasó con la vivienda, entró a su casa y colmó de barro todo, heladera, la moto que tenía y cocina, colchones, cama, todo. Esta familia está en la Hostería y espera la colaboración de todos porque realmente la docente perdió todo y no tiene siquiera cómo ir a trabajar ya que la moto está llena de barro y no anda”, detalló.