Sociedad

A cuánto suben las junilaciones desde junio y cómo impacta el bono de $70.000

Con un aumento del 2,78% y la continuidad del bono extraordinario, el haber mínimo para jubilados alcanzará los $374.723,93. El Gobierno mantiene el refuerzo, aunque sin actualizarlo desde marzo.

  • 30/05/2025 • 08:47

El Gobierno argentino oficializó un nuevo aumento en las jubilaciones y pensiones a partir de junio de 2025, conforme a la Resolución 237/2025 publicada en el Boletín Oficial. Este incremento del 2,78% se basa en la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de abril y forma parte del esquema de actualización mensual por inflación implementado desde abril de 2025.

Nuevos montos para jubilados a partir de junio de 2025

  • Jubilación mínima: $304.723,93

  • Jubilación mínima con bono: $374.723,93

  • Jubilación máxima: $2.050.503,62

  • Prestación Básica Universal (PBU): $139.397,29

  • Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM): $243.779,14

El bono extraordinario de hasta $70.000 continuará vigente para jubilados y pensionados, destinado a quienes perciben haberes mínimos, incluyendo beneficiarios de la PUAM y pensiones no contributivas.

Evolución reciente de las jubilaciones

  • Abril 2025: Aumento del 2,4% sobre el haber mínimo, que pasó a $285.820,63. Con el bono de $70.000, el total ascendió a $355.820,63.

  • Mayo 2025: Incremento del 3,73%, llevando la jubilación mínima a $296.481,74. Sumando el bono, el haber total fue de $366.481,74.

  • Junio 2025: Con el nuevo aumento del 2,78%, la jubilación mínima se establece en $304.723,93. Al agregar el bono, el ingreso total alcanza los $374.723,93.

Qué pasará con el bono para jubilados de 70.000 pesos

El Gobierno nacional confirmó la continuidad del bono extraordinario de hasta $70.000 para jubilados y pensionados en junio de 2025, según lo dispuesto en el Decreto 367/2025. Este bono, que se mantiene sin cambios desde marzo de 2024, busca reforzar los ingresos de los sectores más vulnerables del sistema previsional.

¿Quiénes lo reciben y en qué monto?

El bono se otorga en su totalidad a quienes perciben el haber mínimo, que en junio asciende a $304.723,93. De esta manera, el ingreso total para estos beneficiarios será de $374.723,93. Además, los titulares de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) y de las Pensiones No Contributivas (PNC) también recibirán el bono completo, elevando sus ingresos a $313.779,14 y $283.306,75, respectivamente.

Para quienes perciben haberes superiores al mínimo, el bono se otorga de forma proporcional hasta alcanzar un tope de $374.723,93. Por ejemplo, un jubilado que cobra $314.695 recibirá un bono de $60.000; si cobra $324.695, el bono será de $50.000, y así sucesivamente, reduciéndose en tramos de $10.000 hasta llegar a quienes cobran $364.695, que recibirán un bono de $10.000.

¿Cómo se paga y cuándo?

El bono se acredita automáticamente junto con el haber mensual y la primera cuota del aguinaldo, sin necesidad de realizar trámites adicionales. El calendario de pagos de Anses para junio se organiza según la terminación del número de DNI y el monto del haber, comenzando el lunes 9 de junio para los beneficiarios de la mínima.

¿Por qué sigue congelado?

A pesar de los ajustes mensuales por inflación en los haberes, el monto del bono se mantiene sin cambios desde marzo de 2024. Según estimaciones, si se hubiera actualizado por la fórmula de movilidad, el bono debería ser de aproximadamente $158.620. Esta situación ha generado críticas, ya que implica una pérdida de poder adquisitivo para los jubilados y pensionados que dependen de este refuerzo.

Contexto y perspectivas

Desde abril de 2025, las jubilaciones y pensiones se ajustan mensualmente según la inflación, reemplazando el esquema anterior que combinaba salarios y recaudación previsional. Aunque esta medida busca preservar el poder adquisitivo de los beneficiarios, diversos sectores advierten que los incrementos no siempre compensan completamente el aumento del costo de vida.

En septiembre de 2024, el presidente Javier Milei vetó una ley aprobada por el Congreso que proponía un aumento adicional en las pensiones, argumentando que comprometería el equilibrio fiscal. Este veto generó tensiones políticas y debates sobre la sostenibilidad del sistema previsional y la protección del poder adquisitivo de los jubilados.