River no brilló pero Demichelis ganó el duelo táctico del Superclásico

River derrotó hoy por 2 a 0 a Boca en la Bombonera y se adueñó de una nueva edición del Superclásico, en un partido en el que no brilló pero en el que supo capitalizar las falencias de su rival para atesorar tres puntos claves.

El equipo de Martín Demichelis se impuso de entrada en el duelo táctico y dominó por completo el juego en la mitad de la cancha, por lo que se fue al descanso con un merecido triunfo parcial por 1 a 0.

En la segunda parte, Boca movió el tablero y parecía que iba a complicar el panorama para el "Millonario", pero Demichelis contraatacó con los cambios y River controló nuevamente a su rival, mientras que no pasó grandes sobresaltos más allá del gol anulado a Edinson Cavani.

El mejor del encuentro fue Nicolás De La Cruz, aunque también hubo otros puntos altos como Enzo Pérez y Manuel Lanzini, además de los goleadores de la tarde Salomón Rondón y el ingresado Enzo Díaz.

El siguiente es el análisis, jugador por jugador, del rendimiento de River en el Superclásico:

Franco Armani (6): Tuvo una gran atajada a los 15 minutos en un mano a mano con Darío Benedetto. Después, prácticamente no volvió a tener protagonismo.

Andrés Herrera (6): Constantes proyecciones por la derecha, pero sin resolver con eficacia en el cierre de las jugadas. No obstante, fue de las armas más importantes que tuvo River en el ataque.

Leandro González Pirez (6): Firme de arriba y de abajo.

Paulo Díaz (6): Al igual que su compañero de zaga, buen encuentro del chileno.

Milton Casco (6): Cumplió en defensa y en ataque, pero tuvo que retirarse de la cancha a pocos minutos de empezar el segundo tiempo a raíz de una caída que le produjo un fuerte golpe.

Enzo Pérez 6.5: Una pieza vital para ganar el mediocampo como lo ganó River en la etapa inicial. Además, su disparo fue la llave que abrió el partido con el desvío en Salomón Rondón. Con el correr de los minutos se notó el desgaste físico.

Nicolás De La Cruz (7): Se sacrificó para equilibrar la mitad de la cancha y sus cambios de ritmo fueron incontrolables para Boca, que no pudo adivinar sus acciones a lo largo del juego.

Ignacio Fernández (6): De mayor a menor. En la etapa inicial tuvo mucho espacio para moverse a espaldas de los mediocampistas rivales y aportó mucho en la generación. De a poco empezaron a mermar sus apariciones y luego fue reemplazado a los 15 del complemento.

Manuel Lanzini (6.5): Influyó en el juego menos de lo que insinuó en varias situaciones en el primer tiempo. Mejoró en la segunda parte y fue más punzante para dañar a Boca, con lo que le alcanzó para subirse al podio.

Esequiel Barco (6): También insinuó más de lo que finalmente concretó. No estuvo preciso en los últimos metros y eso le impidió al elenco de Martín Demichelis poder liquidar antes el Superclásico.

Salomón Rondón (6.5): Contó con espacios y fue buscado continuamente por los mediocampistas ofensivos, pero no estuvo fino hasta que lo benefició la suerte para desviar el remate de Enzo Pérez. A partir de eso y de la forma en la que incomodó a la defensa de Boca, se convirtió en un futbolista determinante del encuentro.

Facundo Colidio (5): Su pasado en Boca lo transformó en el foco de los insultos, tanto desde las tribunas como dentro de la cancha. Entró a jugar de nueve y, si bien no tuvo grandes intervenciones, cumplió, pero falló dos chances inmejorable en el cierre.

Rodrigo Aliendro (5): Participó menos de lo que se esperaba, aunque el partido ya estaba roto cuando el volante saltó al campo de juego.

Enzo Díaz (7): Le tocó ingresar por Casco y tuvo un buen nivel pese a que en sus minutos en cancha Boca amontonó jugadores en ataque. Se las ingenió para proyectarse y fue el encargado de sentenciar el triunfo de contra.

Ramiro Funes Mori y Gonzalo Martínez no jugaron el tiempo suficiente para ser calificados.